Nuevo ministro de Agricultura: Antonio Walker, un ministro con grandes desafíos…

En el gabinete presentado por el futuro Presidente de Chile, Sebastián Piñera, destaca el nombramiento del ministro de Agricultura, José Antonio Walker Prieto, no solo por provenir del mundo independiente, sino que porque asume esa cartera un dirigente ligado a los productores y exportadores frutícolas.

La nueva autoridad máxima de Agricultura fue presidente por más de una década de Fruséptima, y en mayo de 2010 fue elegido para dirigir la Federación Nacional de Productores de Fruta (FEDEFRUTA), sucediendo a Rodrigo Echeverría.

El ministro Walker tiene grandes desafíos en su cartera. La gran mayoría autoimpuestos, debido a que fue el propio ministro quien ayudó a definir los lineamientos para el campo de la agricultura en el Programa de Gobierno del Presidente Piñera.

Entre los principales objetivos y medidas está el implementar la “Política Nacional de Desarrollo Rural y Agrícola, para igualar las oportunidades con el mundo urbano al año 2026”. Para ello se propone implementar una definición de ruralidad basada en los criterios de la OCDE; conformar un Comité de Ministros de Desarrollo Rural y una Secretaría Técnica, que articule y desarrolle un plan de trabajo a implementar en cada ministerio y a nivel de cada región; nombrar un Comité Asesor del Consejo de Ministros de Desarrollo Rural, conformado por personas del sector público y privado; y crear un Observatorio Externo de Monitoreo sobre la implementación, avances y resultados de esta nueva política de desarrollo rural.

El segundo objetivo es “Asegurar la disponibilidad de agua para potenciar el desarrollo del sector”, y las medidas principales son restablecer la certeza jurídica de la propiedad de los derechos de agua; aumentar la superficie y seguridad de riego, con énfasis en el riego tecnificado; impulsar el Plan Nacional de Regulación y Embalses, y avanzar en la cuantificación de acuíferos subterráneos.

El tercer objetivo de trabajo para la agricultura es “Apoyar las empresas familiares rurales”, fortaleciendo la regularización de títulos de propiedad, mejorando los programas de INDAP, especialmente los PRODESAL, e incorporar nuevos mecanismos de asociatividad y colaboración entre pequeños agricultores.

Otro objetivo del nuevo gobierno para la agricultura es “Mejorar la competitividad de las Pymes agrícolas”, y para esto propone diversas medidas, como modernizar los productos financieros para medianos agricultores a través de Banco Estado y la banca comercial; implementar sistemas facilitadores de factoring; el uso de seguros agrícolas para cultivos anuales y seguros de precios; promover el uso de nuevas tecnologías de apoyo a los procesos productivos y asesoría a la comercialización; e incorporar medidas al Estatuto del Trabajador Agrícola.

El quinto objetivo que deberá abordar el futuro ministro será “Profundizar la integración al mundo”, potenciando la apertura de nuevos mercados y TLC vigentes, especialmente en el caso de India, de forma de seguir el camino iniciado con China; reforzar el SAG mediante la creación de un Comité de Agilización Normativa; implementar plenamente la plataforma de Exportaciones SICEX y la certificación electrónica del SAG; impulsar la exportación de productos de nicho, con especial fomento a la agricultura orgánica; potenciar el turismo agrícola y rural; e impulsar una ley larga de puertos, que considere al sector alimentos como rubros sensibles.

El último objetivo asociado a la agricultura es “Introducir mayor competencia en el sector agrícola y modernizar la institucionalidad del sector”, perfeccionando la ley de Muestra y Contramuestras; fortalecer el rol de la Fiscalía Nacional Económica en materia agrícola; avanzar hacia un nuevo Ministerio de Agricultura, Alimentos y Recursos Naturales y la institucionalización de la Agencia de Control de Inocuidad de Alimentos.

En el sector agrícola su nombramiento fue recibido con optimismo y algunos personeros lo hicieron público en los medios de comunicación, como Ricardo Ariztía, de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), quién se mostró complacido porque es “un hombre que conoce muy bien las necesidades de la agricultura y los desafíos de nuestro sector”, agregando que “Antonio es una persona que le gusta trabajar en terreno y cree firmemente en la asociatividad, en el aporte de la agricultura para el desarrollo de la regiones, y la modernización de nuestra actividad”. Luis Schmidt, presidente de Fedefruta, calificó al ministro Walker como “uno de los nuestros”, deseándole el mayor de los éxitos “en una tarea que no es para nada fácil, con muchos desafíos”.

El futuro ministro Walker no sólo tiene una destacada trayectoria gremial liderando al sector frutero maulino y nacional, sino que su sello ha estado focalizado en la modernización de los huertos, la reconversión, la asociatividad entre productores, y sobre todo en la promoción del modelo de exportación directa.

Fuente: Martín Carrillo O. – Blueberries Consulting

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