Las actividades programadas para los martes y jueves del mes de agosto, en el contexto del Mes Internacional del Arándano 2022, han sido muy variadas y se han caracterizado por abordar en extenso cada uno de los aspectos principales que están vinculados al cultivo y comercialización del arándano en el mundo.

El pasado martes se trató en profundidad la situación de la industria del arándano en Marruecos, el estado y perspectivas del fruto en el comercio detallista internacional y la realidad del fruto en la industria y el mercado italiano.

La puerta de África

En el caso de Marruecos, el encargado de presentar el “Estado actual y proyecciones de la industria marroquí del arándano” fue Amine Benani, presidente de los productores de frutos rojos de Marruecos, quien recordó que la industria marroquí ha transitado rápidamente desde las 15 hectáreas en 2008 a las 5000 hectáreas actuales y 6000 proyectadas al corto plazo, en una industria que crece rápidamente de la mano de la tecnología, los modernos sistemas de manejo y de las nuevas variedades mejoradas, más productivas y de mejor calidad de fruto

La industria marroquí produce principalmente desde octubre a junio y exporta su fruta a 54 países, llegando con un producto fresco en 3 o 4 días a los mercados europeos, en el que su principal destino es el mercado inglés. Es una industria que crece un 20% anual, que tiene concentrada su producción en la zona norte del país, aunque se está extendiendo al sur y a las zonas altas, buscando ampliar su calendario, con el fin de abarcar todo el año de producción y oferta en el mercado.

La calidad, el mejor marketing

El análisis del mercado detallista y la realidad del consumo mundial, en las presentaciones: “Estado actual y proyecciones de la industria del arándano en Europa”, a cargo de Hans Liekens, jefe de Marketing de Sekoya y “Venta en los supermercados y la estructura del consumo en Italia”, por Thomas Drahorad, presidente NCX Drahorad srl, complementaron la jornada, explayándose en los aspectos relacionados al consumo, los hábitos de los consumidores y las cualidades del producto.

“La fruta tiene que verse bien” “Es super importante tener una calidad consistente” “Hay que observar que pasa desde la granja al tenedor, todos estos elementos y variantes impactan en la calidad”, advierten ambos frente a una realidad preocupante de consumo, que tiene casi un 50% de calificación como una mala experiencia y menos de un 25% la califica como una experiencia positiva.

“Hay gente que deja de consumir por semanas y este impacto es enorme” “Debemos conseguir una calidad consistente” “Años atrás queríamos tener buena distribución, hoy es la calidad la diferenciación”, insisten. “El mejor marketing es la calidad”, concluyen

Calidad y sustentabilidad

Respecto a la relación de la calidad de la fruta y la sustentabilidad, los analistas concluyen que, al estar relacionada la calidad con la firmeza y condición de la fruta se provoca muchos menos desperdicio de alimentos, por lo que la calidad de la fruta además tiene una muy buena historia de aceptación en los supermercados en este aspecto.

“El consumo de agua del arándano es muy bajo en relación con otras frutas y en otros aspectos también estamos muy bien encaminados respecto a sustentabilidad, como en la huella de carbono, porque el transporte en barco tiene una huella menor de carbono”, resaltan.

Nuevos sistemas y tecnologías

En la última jornada, correspondiente al jueves 25 de agosto, se abordó la “Producción de arándanos en sustratos”, por el investigador portugués Pedro Brás de Oliveira, del Instituto Nacional de Investigação Agrária e Veterinária, constatando que “las plantas de arándanos ya están bien adaptadas a los sistemas de sustratos y de agricultura protegida”, destacando que estos nuevos sistemas, asociados a la genética de las nuevas variedades, permite a los productores e inversionistas cosechar al primer año de ser plantadas, lo que facilita recuperar con rapidez la inversión y rentabilizar la actividad a corto plazo.

Estrés hídrico y calidad

Luego se trató el “Mejoramiento de la calidad de frutos de arándano en condiciones de estrés hídrico mediante el uso de inductores hormonales”, presentado por Cristián Balbontín, Encargado Programa Fitomejoramiento y Fitotecnia Berries en INIA.

“La planta no pude huir del estrés, por lo que tiene que acomodarse” sostiene el especialista y explica de manera detallada su investigación basada en la aplicación de inductores hormonales que activan los genes de la planta para mejorar la resistencia al estrés hídrico.

Después de un extenso y detallado análisis de los datos evacuados de su investigaciones, Balbontín concluye que claramente el déficit hídrico compromete el metabolismo de la planta y por consiguiente, la producción de fruta de calidad, por lo que el uso de inductores hormonales, como el ácido abscísico y el jasmonato, han mostrado no solo incrementar la tolerancia al estrés de la planta en condiciones de déficit hídrico, sino que la calidad de los frutos del arándano se ve incrementada  por el uso de estos inductores hormonales, tanto   en condiciones de provisión hídrica completa, como en condiciones de menor disponibilidad de agua.

Un programa sólido y completo

La jornada concluyó con la presentación “Nutrición Nitrogenada, Potásica y Complementos Foliares en Arándanos cultivado en suelo y sustrato”, relatada por el reconocido investigador y consultor internacional Juan Hirzel, quien siempre se destaca en ser muy generoso en compartir conocimientos y aclarar dudas respecto a los distintos aspectos técnicos y agronómicos relacionados al cultivo del arándano, siempre basado en la evidencia científica publicada y sus propias investigaciones.

En las jornadas anteriores del Mes Internacional del Arándano se habían abordado las realidades de los principales países de la industria latinoamericana y sus proyecciones u objetivos a futuro, el estado de los mercados internacionales, los aspectos logísticos, de postcosecha, de envíos y recepción de la fruta, lo nuevo en automatización y los distintos desafíos del cultivo del arándano, tanto en el huerto como en los mercados.