Durante los dos últimos meses, ha habido muchas dificultades con el suministro de arándanos peruanos y se han vendido volúmenes muy reducidos a precios de récord. Sin embargo, Theo Benjert y Rob Pakvis, de la firma holandesa Berryland, esperan ahora un repunte de la oferta. «En noviembre se espera al menos el triple de volumen que en los últimos meses. Eso sí, dicho incremento será efímero, porque en diciembre la oferta volverá a caer. Se espera que los precios caigan ligeramente, pero creemos que se mantendrán por encima del nivel del año pasado».

«Los productores peruanos se enfrentan a varios problemas. Por ejemplo, en ciertas regiones, persisten todavía los efectos de El Niño. Esto no afecta a todo el mundo, pero hay productores que han perdido hasta el 60% de su cosecha. Sin embargo, el mayor problema de este año tiene que ver con la poda. Muchos productores podaron tarde porque los precios eran altos en aquel momento, y no esperaban que esto tuviera ninguna consecuencia, pero luego esas plantas han dado mucha menos fruta. Mientras que el año pasado la oferta total se situó un 40% por debajo de lo previsto, este año los volúmenes se mantienen un 60% por debajo. Los precios pueden ser buenos, pero no compensan, ni de lejos, la escasez de volúmenes».

La situación en el mercado de la frambuesa tampoco es fácil ahora mismo. «Esperamos escasez este invierno. Los productores mexicanos han recibido bastantes menos plantas de las que habían pedido, por lo que prácticamente toda la fruta se ha comercializado ya en preventa. China y Norteamérica se disputan la fruta mexicana, y Rusia, que suele comprarle mucho a México, está recurriendo a Marruecos. Esto complicará aún más la temporada, ya que Marruecos ha recibido menos plantas. El país empezó antes con la cosecha, pero como el retail sigue ofreciendo sobre todo frambuesas belgas y holandesas, el precio está bajo algo de presión. Eso sí, espero que los precios se disparen en cuanto los supermercados se pasen a las importaciones. En cualquier caso, no habrá mucha fruta disponible durante los meses de invierno», afirma Rob.

El mercado de la mora también se enfrenta a una grave escasez. «Hay muy poco producto holandés y belga; sin embargo, se están introduciendo muchas variedades nuevas y prometedoras en Marruecos para este invierno. Un ejemplo es la Indra, que es grande y firme y tiene un muy buen sabor. Nuestros productores también cultivan esta variedad en Tanzania, que consideramos un mercado prometedor para los frutos rojos. Ya teníamos allí proyectos de cultivo de frambuesas, y ahora también los hay de moras, arándanos y fresas. Aunque todavía estamos trabajando a pequeña escala, tenemos grandes expectativas para este mercado», concluyen Theo y Rob.