El Niño se retira y esperamos a La Niña…
Analizando los eventos anteriores, similares al evento actual, se desprende que los meses claves para tener una mayor certeza de un eventual paso a la fase de La Niña son mayo y junio. De todas formas, los modelos indican que en el trimestre junio, julio, agosto, deberíamos estar en fase neutra.
Primero hay que destacar que marzo fue uno de los meses más secos de los últimos cincuenta años según la Dirección Meteorológica de Chile, perteneciente a la Dirección General de Aeronáutica Civil, DGAC. Esta realidad cierra un trimestre en que las variables muestran un déficit de precipitaciones que llegó a niveles preocupantes.
Contemplando la zona principal de producción de arándanos, que es desde la Cuarta a la Décima Región, el déficit de precipitaciones observado muestra índices que van desde los 40mm a los 140mm. A pesar de las abundantes precipitaciones de abril en la zona central del país el déficit tiende a mantenerse desde 2015.
Los indicadores meteorológicos indican que el fenómeno de El Niño, FEN, se encuentra en fase de declinación, aunque aún permanece en intensidad de moderado. Las observaciones de la anomalía de la temperatura superficial del mar, TSM, de El Niño 3.4 fue de +1.64°C. Se observa en las últimas semanas un descenso significativo en todas las regiones de El Niño, llegando a 1.3°C hasta la primera semana de abril en la región de El Niño 3.4.
Otro rasgo característico de la declinación de El Niño, es con respecto a las anomalías de las aguas sub superficiales, las que muestran la incorporación de aguas más frías y profundas a niveles de superficie (de 155m a 55m). Según esto, la razón de descenso de la temperatura del mar es similar a las experimentadas en la transición de los eventos de 1982-1983 y 1997-1998, los cuales presentaron fuerte enfriamiento durante mayo.
En el evento 1982-1983 la TSM se mantuvo en el rango de neutro a frío, no logrando pasar a una fase de La Niña definitiva, mientras que en el periodo 1997-1998, durante el trimestre de junio, julio, agosto, ya estábamos en fase de La Niña, produciendo un impacto negativo en las precipitaciones.
Analizando los eventos anteriores, similares al evento actual, se desprende que los meses claves para tener una mayor certeza de un eventual paso a la fase de La Niña son mayo y junio. De todas formas, los modelos indican que en el trimestre junio, julio, agosto, deberíamos estar en fase neutra.
Precipitaciones
Sobre la base de las observaciones de la TSM de marzo de 2016 y la Herramienta de Predicción Climática (CPT, por sus siglas en inglés), que mide las variables, precipitación, temperatura máxima y temperatura mínima, la predicción climática para los meses de abril, mayo y junio, para las zonas de producción de arándanos, serán las siguientes:
- La Cuarta Región se presentará en torno a lo normal.
- En la zona central variará entre normal a seco, tomando en cuenta que todas las estaciones se pronostican en el límite inferior del rango de normalidad.
- En la zona sur el pronóstico indica normal, pero varias estaciones están sin señal climática.
Respecto a las temperaturas extremas para las mismas zonas, se indica que la temperatura máxima estará sobre lo normal entre la Cuarta y la Quinta Región, y también entre la Novena y la Décima Región, en el resto de las regiones contempladas en la zona de producción de arándanos se presentará como de temperatura normal.
La temperatura mínima estará también sobre lo normal entre la Cuarta y la Quinta Región, sin embargo en el resto de las regiones contempladas se presentará dentro de los rangos normales.
Todo este panorama indica que las heladas llegarán con la primavera, más específicamente en los meses de septiembre y octubre, por lo que hay que tomar las precauciones del caso para los cultivos vulnerables a estos fenómenos.
Siglas y regiones del fenómeno
El Fenómeno de El Niño, FEN, también lo identificamos como El Niño, Oscilación del Sur, ENOS, que es la interacción de un fenómeno oceánico-atmosférico que ocurre en la región del océano Pacífico tropical cada 2 a 7 años. Este ciclo global tiene dos fases:
- En el océano se manifiesta como una oscilación de la temperatura superficial del mar entre una fase cálida, correspondiente a El Niño, y una fase fría correspondiente a La Niña, a lo largo del Pacífico tropical
- En la atmósfera se manifiesta como una oscilación entre una fase negativa, correspondiente a El Niño, y una fase positiva, que corresponde a La Niña, de la Oscilación del Sur, OS.
La Oscilación del Sur, OS, una de las manifestaciones más importantes de la variabilidad interanual y constituye una fluctuación en el sistema océano – atmósfera.
El Índice de Oscilación del Sur, IOS, es un indicador de la presencia de un evento ENOS, que mide la diferencia entre la anomalía promedio mensual de presión atmosférica superficial en Tahití y el puerto de Darwin, Australia. Cuando éste número es positivo, tenemos un evento La Niña y cuando el número es negativo, es El Niño.
Por su parte, el fenómeno está dividido en regiones para tener una mayor comprensión de cómo se desarrollan los eventos, tanto de El Niño como de La Niña, a lo largo del océano Pacifico ecuatorial y de Oeste a Este.
- La región Niño 1+2 incluye las costas de Perú y Ecuador incluidas las Islas Galápagos, esta región representa un indicador de los cambios inducidos por El Niño en los patrones de variabilidad de la costa del Pacifico de América del Sur.
- Las regiones 3 y 4 se encuentran ubicadas en el lado occidental del Pacífico y se caracterizan por presentar las máximas anomalías de temperatura superficial del mar.
- La región Niño 3.4 es una subregión comprendida entre las regiones Niño 4 y 3 y representa un buen indicador de la correlación entre la temperatura superficial del mar y el índice de Oscilación del Sur (ENOS).
Fuente: Blueberrieschile.cl – Blueberriesconsulting.com