Si bien algunos productores comienzan a mediados de julio dependiendo de su ubicación y de la poda de la temporada anterior, mediados de agosto será el comienzo generalmente para los arándanos del centro de México.

“Las plantas se ven muy saludables y la fruta se ve bien. En este momento, las temperaturas más altas son 71ºF y la mínima en las primeras horas de la mañana es de 46 a 50ºF. Esto es muy bueno para que la fruta gane azúcares y tamaño ”, dice Gerardo López de Produce Lovers. «Vamos a ver más arándanos tanto en las temporadas tempranas como tardías a medida que las fincas se están desarrollando y madurando y la producción está aumentando en cada una».

Mejoras de calidad

Con esas fincas adicionales y maduras también se continúa el desarrollo y el enfoque en la calidad de los arándanos mexicanos. “Los minoristas de América del Norte, el Reino Unido y Asia están comenzando a notar la calidad de los arándanos mexicanos. Es una buena experiencia de comer porque tiene buen tamaño, sabor y textura y eso es lo que busca el consumidor ”, dice López.

En ese momento competirán con los arándanos mexicanos la Columbia Británica, Canadá, así como la producción tardía de los Estados Unidos de Michigan y el estado de Washington. “Luego hay una brecha de disponibilidad que México cubre desde septiembre hasta mediados de noviembre y luego Perú comienza a llegar con fuerza a mediados de noviembre”, dice López.

Mientras tanto, según la demanda, López señala que hay indicios de que la demanda de arándanos debería aumentar entre un 10 y un 20 por ciento. “La pandemia ha obligado a la gente a comer en casa, por lo que hay más demanda a nivel minorista. Y es de esperar que esta tendencia de gente a comer sano continúe ”, añade. También señala que, dada la reapertura del servicio de alimentos en América del Norte, mientras que Produce Lovers anticipa un aumento de la demanda, es probable que no alcance los niveles prepandémicos.

Problemas de empaque

El movimiento desafiante de los arándanos será la continuación de un problema que surgió en la pandemia: el acceso al cartón. “La temporada pasada tuvimos desafíos con el cartón debido a muchas fábricas y América del Norte y Europa cerraron debido a la pandemia. Algunas empresas comenzaron a experimentar escasez, parece que ya no es estable. También la compra online ha exigido una gran cantidad de materiales de embalaje. Están usando muchas más cajas de las que solían usar y eso ejerce presión sobre la disponibilidad de productos frescos ”, dice López.

En cuanto a los precios de la próxima temporada, López señala que dependerá en gran medida de qué tan bien los minoristas comercialicen la fruta. Si bien los precios tienden a ser más fuertes hasta octubre, una vez que comienza a llegar la fruta peruana, el volumen y, a veces, la falta de promociones empujan los precios a la baja. “Así que esperamos un mercado saludable hasta octubre y para noviembre comenzará a bajar y luego se recuperará a fines de febrero”, dice López.