Miguel Altieri: “La sequía ha llegado para quedarse…”
Miguel Altieri es Ingeniero Agrónomo de la Universidad de Chile, académico en Agroecología en la Universidad de California y fue invitado por Indap al Seminario Internacional “Agroecología y Sustentabilidad para la Agricultura Familiar Campesina”, que realizó el miércoles 25 de marzo en las dependencias del GAM, en Santiago de Chile.
“La sequía ha llegado para quedarse, los modelos de cambio climático pronostican que Chile y toda la zona mediterránea reducirá en un 50% sus precipitaciones, igualmente en la cantidad de nieve”, sostuvo el académico y experto en agroecología, y agrega: “El IPCC (Panel Intergubernamental del Cambio Climático) se da cuenta que sus predicciones se están dando mucho más rápido de lo que pensaban”.
El profesor Altieri sostiene que hay que ver cómo los agricultores se van a adaptar a esta nueva realidad, porque el hecho que vengan lluvias torrenciales intempestivas “no significa que la sequía no siga avanzando”.
Refuerza su tesis haciendo un llamado a la prevención temprana, a la toma de grandes decisiones, a la implementación de una mirada de futuro y estratégica, tanto en el país como en la región, desde el Estado y desde la iniciativa privada, para los grandes cultivos como para los pequeños agricultores.
“En Brasil implementaron un millón de cisternas para recolectar el agua lluvia…se debe implementar la cosecha del agua” asegura con urgencia el académico.
Plantea que si los campesinos, a través del manejo agroecológico incrementan el 1% del contenido de materia orgánica, o sea, reciclando el guano e incorporándolo al suelo, esto equivaldría a una represa de muchos miles de litros de agua.
“10 toneladas de compost por hectárea equivaldría a un ahorro considerable de agua”, advierte.
La agroecología es una nueva manera de realizar la agricultura y se basa en los saberes locales. El vehículo más efectivo es el “campesino a campesino”, en donde los más avanzados comparten la experiencia y conocimientos con los más atrasados. En este punto aprovecha de hacer un llamamiento a volver al usos de las “semillas criollas” en los grandes y pequeños cultivos, porque están “más preparadas para los períodos de sequías” y son más resistentes a los años secos.
El profesor ejemplifica esta alternativa de producción con experiencias estatales exitosas en Brasil, Cuba y otros logros locales a nivel latinoamericano, tanto estatales como de iniciativa privada.
Un vehículo para extender esta forma de enfrentar la nueva agricultura puede ser Indap u otras instituciones oficiales, u ONGs, pero el principal vehículo – sostiene el profesor- es el de conformar “redes de pares”.
Llama la atención de los asistentes al Seminario Internacional, entre los que se encontraba el ministro de Agricultura, Carlos Furche, destacando que “los agricultores controlan el 20% de las tierras y producen el 70% de la comida, sin embargo, la gran industria agrícola controla el 70% de las tierras y produce solo el 30% de la comida debido a que ellos principalmente producen biomasa, bioplásticos, biocombustibles y otros similares. Los que producen la comida son los campesinos”, enfatizó el académico.
Plan del Gobierno contra la sequía
Respecto al plan del Gobierno para combatir la sequía y que contempla una inversión de US$170 millones, plantea que esto “no es combatir la sequía sino que mitigar los efectos de la sequía. Lo que hay que hacer es ver cómo vamos a producir con esta realidad”.
En el plan de gobierno se proyecta construir 19 grandes embalses al año 2024, e impulsar la realización de plantas desalinizadoras en Copiapó, el Valle del Choapa, Limarí, Petorca, La ligua, y Azapa. Se contempla también la incorporación de plantas micro desalinizadoras en Valparaíso, Coquimbo, Maule y Bío Bío, e infiltración de aguas subterráneas y la construcción de pozos profundos.
Asimismo se realizará la instalación de geomembranas para evitar pérdidas en los sistemas de acumulación y conducción de aguas.
El profesor Altieri, reconoce el valor de la iniciativa y la gran inversión económica y tecnológica que hay detrás de ella, pero insiste en que hay que internalizar en los campesinos y en todos los actores ligados a la producción agrícola el concepto de “cosechar el agua”, ocupando todos los medios, ya sea mediante embalses, pozos o los mismos techos de las casas para capturarla y destinarla al riego u otras necesidades humanas. “No dependamos tanto de la tecnología de alto costo”, enfatiza, y hace un llamado a explorar en los sistemas silvopastoriles, en la reforestación para que no se pierda el agua por evaporación, en el molchi (que es colocar una capa de paja sobre los cultivos para evitar la evaporación del agua) y en otras tantas iniciativas destinadas a la “cosecha de agua”.
Pero sobre todo, el profesor Altieri, llama la atención del Estado en la regulación y propiedad de los recursos vitales para la agricultura, asegurando que “el agua y las semillas deben quedar en las manos de los campesinos, porque son los que nos alimentan”.
Miguel Artieri es Doctor en Entomología de la Universidad de La Florida, y si consultamos su nombre en la web nos encontramos con varias páginas de libros, publicaciones y colaboraciones respecto a la agricultura y su sustentabilidad en el tiempo. Se destaca el libro AGROECOLOGIA “Bases científicas para una agricultura sustentable”, que realizó en conjunto con S. Hecht, M. Liebman, F. Magdoff y R. Norgaard en 1999. En él entrega las pautas para un manejo cuidadoso de los agroecosistemas sin provocar daño innecesario o irreparable al entorno, en forma simultánea con el esfuerzo por combatir las plagas, enfermedades o deficiencias del suelo. Se repiten los títulos como “Agroecología y el desarrollo rural sostenible en América Latina”; “Agroecologia y desarrollo”; “Agroecology: the scientific basis of alternative agricultura”, entre decenas de trabajos de su autoría o en conjunto con otros autores, que han sido citados centenares de veces para artículos, tesis, ponencias o reportajes como éste a lo largo y ancho del mundo.
Fuente: Blueberrieschile.cl
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