«Nueva ola de concesiones portuarias en la región es una oportunidad para revisar la eficiencia y las ganancias de inversión»
Un panorama repleto de desafíos, pero también con importantes oportunidades es el que visualiza Dinesh Sharma, director de Drewry Maritime Advisors, para la industria portuaria de América Latina. En conversación exclusiva con MundoMarítimo, el analista repasó las actuales condiciones del sector y sus proyecciones, acentuando el reto más inmediato e importante: la ampliación de la capacidad portuaria que correrá por cuenta de una nueva ola de concesiones.
“Creo que el crecimiento [de la movilización de copntenedores] es el mayor desafío que tendrá que abordar la región. Muchas de las concesiones están llegando a su fin en América Latina y el mercado, hoy en día, es muy diferente al de las concesiones que se firmaron hace 30 años”, advirtió.
En el pasado, indicó, “se trataba de transferir las terminales del sector público al sector privado para impulsar la eficiencia, la productividad y las inversiones. Hoy, el mercado y las necesidades son muy diferentes por lo que las nuevas concesiones que lleguen deberán asegurarse de abordarlas e incorporarlas”.
No obstante, sostuvo que esta “es una oportunidad para que en los próximos años América Latina revise los acuerdos de concesión para impulsar la eficiencia, la productividad y las ganancias de inversión para beneficio de la región”.
Inversiones en curso
El analista destacó las inversiones realizadas y otras en curso en la región en materia de infraestructura. “DP World describió [en la reciente versión de TOC Américas] sus planes y ambiciones para construir mucha más capacidad e invertir en la región”.
Pero subrayó que la clave de estas inversiones pasa por imprimir mayor productividad y eficiencia. En ese sentido recordó el caso de Valparaíso en Chile. “Es un puerto fantástico. Tiene un patio muy pequeño y transfiere los contenedores desde ahí a un depósito fuera del muelle y aun así maneja casi un millón de TEUs. Creo que así es el nivel de productividad y eficiencia que le gustaría ver a las navieras en la región, estamos en un negocio donde el flujo de los contenedores debe ser óptimo y eficiente”, afirmó.
“Los buques no quieren venir a esperar, no quieren congestión. Todo esto cuesta dinero a los expedidores, al exportador.
Es muy importante para una región como América Latina, que depende predominantemente de la exportación de commodities, tener cadenas de suministro eficientes, productivas y que los contenedores se puedan mover velozmente”, añadió, sin olvidar mencionar que las tecnologías también tienen un rol que cumplir en todo esto.
Proyecciones de desempeño portuario
Dinesh Sharma proyectó que en la costa oeste de América Latina se espera que la movilización de contenedores disminuya ligeramente. “Esto se debe a que el área ha tenido un crecimiento muy fuerte en 2023. En 2024, esperamos que tenga un rendimiento similar que en 2023”. En tanto, “en la costa este, creemos que el fuerte crecimiento continuará. Esto se debe a que en 2022 y 2023, no vimos una fuerte tracción de la costa este que todavía se está poniendo al día para llegar a donde necesita estar”. En suma, señaló que esto refleja la tendencia histórica de un mercado dividido en dos mitades y que, en lo inmediato, “habrá un crecimiento lento en la costa oeste durante el resto de 2024, y un crecimiento fuerte en la costa este durante el resto de 2024”.
Factores externos
El analista, sin embargo, no olvidó que el desempeño de los puertos de América Latina también depende de las difíciles condiciones que se producen a nivel global, siendo la geopolítica el principal factor de riesgo. Detalló que este ámbito tiene dos componentes, el primero son los conflictos, propiamente tal, actualmente en curso en Ucrania y en Medio Oriente y, el segundo, “es el uso cada vez más frecuente del comercio como una herramienta geopolítica con el fin de obtener ventajas competitivas”, lo que, indicó, puede generar más disrupciones aún.
Por otra parte, mencionó que los economistas han señalado que en los próximos años la inflación debería empezar a bajar y prevén que vuelva a la normalidad a finales de 2025 y añadió finalmente que “habrá mucha capacidad de transporte marítimo que ingresará al mercado y que será necesario gestionarla, y creemos que las navieras lo harán de forma muy eficaz. Pero hay mucha capacidad latente que está siendo absorbida por las disrupciones, pero que se daría una sobreoferta en el mercado en 2026”.