Sebastián Domínguez, ejecutivo de Utilitas: “Yo creo que ya no existirán ventanas privilegiadas para Chile”
“En Estados Unidos trabajan para tener variedades tardías y guardas de fruta para poder cubrir lo que más puedan esa ventana”.
Como resultado de la temporada pasada, el Comité de Arándanos de Chile declaraba que ésta había dejado “un sabor agridulce”, porque a pesar de haber aumentado en un 12,9% el volumen de las exportaciones, los arándanos chilenos fueron fuertemente golpeados por una caída notable de los precios a nivel internacional, debido – entre otras razones – al aumento en la oferta de otros orígenes y por problemas de condición de la fruta.
Chile exportó 103.144 toneladas, desglosadas en más de 67.000 ton a Norteamérica (Estados Unidos y Canadá), 22.600 ton a Europa (Inglaterra y Alemania) y 12.500 ton a Asia (China y Corea del Sur), lo que sobrepasó lo proyectado por el Comité a principios de la temporada. Una de las razones de este aumento fue el crecimiento de la superficie plantada y la renovación de variedades por aquellas con mayor productividad.
Andrés Armstrong, director ejecutivo del Comité de Arándanos de Chile, comentó en su momento que otra de las razones fue “el bajo precio del congelado, que presionó el aumento del volumen de fresco, tanto en convencional como orgánico, pero especialmente los orgánicos que hasta la temporada pasada encontraron mejores condiciones de precio en el mercado de congelados”.
El adelanto de hasta cuatro semanas en el inicio de las semanas peak que experimentó la temporada 2016 / 2017 fue un hecho sin precedentes, y que según Armstrong los dejó con una ingrata sensación.
“No fuimos capaces de predecir y alertar esta situación que impactó los procesos de cosecha, empaque y logística. Por otro lado, nos encontramos con volúmenes crecientes provenientes de México y principalmente Perú. Todo esto provocó la generación de stocks sin la velocidad de movimiento necesaria, presionando los precios a la baja”, indicó.
Esta oferta creciente de otros países se hizo sentir con fuerza, lo que se evidenció no sólo en el aumento de la oferta semanal y su impacto en las condiciones comerciales, sino que también en la condición de llegada de la fruta nacional en comparación a la extranjera.
“Hubo un importante crecimiento de la oferta de Perú cuyo peak de llegadas coincidió con el inicio de las semanas peak de Chile”, explicó Armstrong.
Basándonos en la fenomenología de la temporada pasada conversamos con Sebastián Domínguez, ejecutivo de la consultora Utilitas, respecto a las perspectivas de la temporada 2017 / 2018.
- La temporada de cosecha temprana sigue siendo tan privilegiada respecto a los valores de la fruta?
Yo creo que ya no van a existir ventanas privilegiadas para Chile. La ventana temprana del hemisferio sur la está cubriendo con volúmenes cada vez más importantes Perú, además que en Estados Unidos trabajan para tener variedades tardías y guardas de fruta para poder cubrir lo que más puedan esa ventana.
Chile históricamente ha desarrollado temporadas de cosecha temprana, lo que le ha permitido aprovechar el beneficio de ventanas comerciales prácticamente sin competencia, llegando a cubrir el 90% de la demanda en años anteriores.
- Que se debe hacer para recuperar esta competitividad?
Hay que trabajar, por mercado y sólo enviar buena fruta y la fruta que solicita cada mercado, por ejemplo China, quiere fruta calibrada (clamshell parejo en tamaño 14 a 16mm; 16 a 18mm; 18 UP). Fruta firme, de buen sabor y bloom.
Sebastián Domínguez vaticina que en esta temporada la ventana va a ser muy temprana y que a principios de Octubre podría haber un diferencial importante en precios, luego se verán volúmenes importantes del hemisferio sur, normalizando el mercado.
Fuente: Martín Carrillo O. – Blueberries Consulting
Articulo anterior
La agricultura será la base del empleo futuroArtículo siguiente
Compositional Changes in Blueberry and Cranberry Fruit during Ripening