Recién concluido el XXVIII Seminario Internacional de Blueberries, ya se pueden sacar conclusiones que dejó el encuentro. Los relatores internacionales y los asistentes que llegaron desde los diferentes países pudieron constatar que la industria del arándano en Marruecos es una actividad consolidada, que se mantiene en alza, tanto en superficie plantada como en volúmenes de producción y envíos de fruta fresca a los diferentes mercados.

Además, es una actividad productiva que mantiene niveles convenientes de rentabilidad y sus productos gozan de una buena acogida y valoración entre los consumidores, lo que se traduce en conseguir precios por encima de la media internacional.

Objetivos 2030

La superficie del arándano en Marruecos ha crecido 800 hectáreas en la ultima temporada, alcanzando las 4800 actualmente en el país y el objetivo de la industria es alcanzar las 6000 hectáreas plantadas en 2030.

En cuanto a los objetivos de producción y exportación de arándanos frescos a los mercados mundiales, el objetivo de la industria marroquí es superar las 100 mil toneladas en 2030, lo que demuestra no solo la consolidación de la industria marroquí, sino que la voluntad de convertirse en protagonista del mercado internacional.

Industria nueva

El cultivo del arándano en Marruecos tuvo un inicio tardío, de tan solo 150 hectáreas en 2008, y un tímido inicio en la exportación de fruta, pero han sido las nuevas variedades, la tecnología, los sistemas de manejo sin suelo y la calidad de la fruta, lo que ha impulsado el explosivo crecimiento de la industria y su reconocimiento en los mercados.

Los flujos importantes de producción y exportaciones en la temporada marroquí se extienden desde diciembre a junio y las últimas temporadas se han mantenido estables, acercándose a las 55 mil toneladas enviadas a los diferentes mercados del mundo, principalmente de la Comunidad Europea.

Ventajas

Además de la privilegiada ubicación geográfica con la que cuenta la industria marroquí, lo que le da una ventaja estratégica frente a la competencia, ya que en tres o cuatro días se traslada su fruta desde la granja hasta el consumidor final, se cuenta con un permanente apoyo del aparato público y estatal, que se traduce en apoyos de fomento, planes financieros, infraestructura y apertura de mercados, entre otros apoyos. Estas ventajas se suman a los costos razonables con que cuentan los productores y a la mano de obra joven pero experimentada existente en el país.

Desafíos

En el caso de los desafíos, está poder lograr una mayor presencia en el mercado chino y contar con la misma valoración que se tiene en los demás destinos de la fruta. Igualmente hay que controlar el crecimiento en el coste de los insumos (hierro, plásticos, fertilizantes, pesticidas…) y conseguir un mayor equilibrio en los valores a pagar, acortando la brecha excesiva entre el precio de venta al consumidor y el pago al productor.

Entre los desafíos se sitúan también la posibilidad de desarrollo del transporte aéreo de mercancías a Oriente Medio y países asiáticos, la disponibilidad de grandes parcelas y solucionar los problemas de disponibilidad de agua, especialmente en la zona de Agadir.

Son muchas más las conclusiones y datos importantes que dejó el XXVIII Seminario Internacional de Blueberries que acaba de finalizar en la ciudad de Agadir y que los iremos analizando en otras publicaciones, pero claramente lo más importante es que Marruecos se consolida como actor importante de la industria global y su industria del arándano manifiesta claramente su voluntad de prácticamente doblar su producción a 2030 e ingresar al selecto grupo de los países que exportan sobre las 100 mil toneladas.