Entre Ríos tiene un Centro de Investigación y Servicios Especializados en Arándanos

El Centro de Investigación y Servicios Especializados en Arándanos dispone de un laboratorio que releva y diagnostica enfermedades que afectan al cultivo en nuestra provincia y, para ello, se formó recurso humano y capacitó a productores. Con financiamiento del Estado, este centro beneficia a la Asociación de Productores de Arándanos de la Mesopotamia Argentina (Apama) con la prestación de servicios especializados que hoy alcanza además a productores de citrus, vid, nuez pecán, arroz y soja, además de entidades estatales y diversas empresas.

El laboratorio está en Concordia y se lo equipó con instrumentos y equipamiento específico, además de adecuar la estructura edilicia de la Facultad de Ciencias de la Alimentación de la Universidad Nacional de Entre Ríos. Una experta en fitopatología en arándanos se radicó en la provincia a instancia de esta iniciativa, y se incorporaron becarios para desempeñarse en el Laboratorio de Análisis de Metales en Alimentos y otros Sustratos (Lamas).

En casi siete años se relevó y diagnosticó las enfermedades que afectan al cultivo de arándanos en la provincia; se investigó y ponderó las necesidades concretas de los productores; se instaló un laboratorio de análisis de metales en alimentos y otros sustratos; se inició un proceso de puesta a punto de técnicas analíticas y de formación de recursos humanos en gestión de calidad; se capacitó a los productores; se definieron líneas de investigación que respondan a las necesidades concretas del sector arandanero y se transfirió los resultados obtenidos al sector productivo en cuestión.

La dinámica de trabajo que se dio fue intercambiar experiencias entre los laboratorios existentes para detectar las demandas y definir hacia donde orientar la investigación. Además, se visitó a todos los productores con frecuencias de 30 a 40 días con el propósito de relevar las variedades implantadas, monitorear los posibles desordenes de nutrientes, tomar muestras para su procesamiento en laboratorio, y establecer una relación permanente para una mejor capacitación y transferencia. Desde 2007 al 2014 se realizaron 1196 visitas a campo, donde anualmente se relevaron 350 hectáreas y se analizaron entre 480 y 550 muestras por año.

De esta manera, se logró la confianza de los productores a tal punto que se trabajó articuladamente entre ellos y quienes integran el proyecto, además de capacitar al personal técnico del Lamas. Con lo cual, cabalmente se cumplió con la prioridad provincial de desarrollar las capacidades locales de análisis en laboratorios para detectar enfermedades, hacer análisis de suelo y foliares.

La iniciativa se desarrolló con financiamiento para Proyectos Federales de Innovación Productiva – Eslabonamientos Productivos, los cuales están destinados a fomentar el acercamiento de la ciencia y la tecnología a las necesidades concretas de los sectores productivos a partir del apoyo al desarrollo competitivo de las cadenas de valor en correspondencia con las estrategias de desarrollo regional. Estos proyectos son instrumentos del Consejo Federal de Ciencia y Tecnología, dependiente del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva.

«El impacto que se generó en la comunidad de productores fue sumamente positivo», con la cual la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación de Entre Ríos, en tanto autoridad provincial auditora de la experiencia, dio por concluidas satisfactoriamente, todas las etapas del proyecto previstas en sus aspectos técnicos y financieros.

Altamente satisfactorio

Al respecto, la doctora y directora del Lamas, Luz Marina Zapata, aseguró que «el trabajo articulado entre diferentes instituciones, el sector productivo y la Facultad de Ciencias de la Alimentación fue altamente satisfactorio».

«Convencidos del aporte que este proyecto realizó al sector arandanero, el Laboratorio participa en el desarrollo de un Centro de Investigación y Servicios en Nuez Pecán en la Provincia de Entre Ríos, con el fin de replicar la experiencia positiva del cultivo de arándano en nuez pecán», informó la experta

Y mucho más. «Con el propósito de lograr un mayor crecimiento y responder a las múltiples demandas del sector productivo, miembros del laboratorio intervinieron en la presentación de otras convocatorias que permitieron fortalecer las capacidades del laboratorio, como son la incorporación un Doctor y dos profesionales, y la adquisición de nuevo equipamiento de alta complejidad», acotó.

Consultada sobre las prestaciones que hoy ofrece el centro, Zapata precisó que «actualmente el laboratorio cuenta con la puesta a punto de las técnicas en análisis de suelo, foliar, de agua y fitopatológicos; brinda investigación, asistencia técnica y servicios especializados de cultivos para la detección de enfermedades y análisis de suelo y foliares, desarrollo de productos funcionales y gourmet como alternativas industriales de alto valor agregado a materias primas regionales. Además, dispone de un equipo humano formado, metodologías validadas y desarrollo de un sistema de gestión de calidad. Estos servicios no sólo están destinados al sector arandanero, sino también a productores de citrus, vid, nuez pecán, arroz, soja, entidades estatales y empresas proveedoras de agua, empresas que desarrollan productos fertilizantes y fungicidas, entre otros», remarcó.

Aciertos y desafíos

Por último, la directora del Laboratorio radicado en la Facultad de Ciencias de la Alimentación de la UNER se refirió a los aciertos y desafíos de esta iniciativa. «Uno de los aciertos más importantes fue reconocer que el trabajo interdisciplinario e interinstitucional nos permitiría crecer. Fue así que recurrimos a instituciones como INTA, otras universidades, empresas y la Asociación de Productores de Arándanos de la Mesopotamia Argentina para tratar de alcanzar los objetivos propuestos», subrayó.

«El desafío de esta iniciativa hoy es ampliar nuestra capacidad de investigación, servicio y transferencia al sector productivo. Es por ello que estamos incorporando recursos humanos y tratando de acceder a tecnología de última generación que nos permita responder a las continuas demandas de servicios especializados que tiene el laboratorio», concluyó.

 

Fuente: Cndigital.com.ar

 

 

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