Con el inicio de las cosechas de exportación de arándanos en Argentina en agosto, la industria está preocupada por la posible escasez de capacidad de carga aérea.

El Gobierno argentino ha cancelado todos los vuelos comerciales hasta el 1 de septiembre, lo que podría causar problemas para la fruta temprana.

“El año pasado, en agosto, Argentina envió el 50% de la producción por vía aérea y el 50% por vía marítima”, dijo a FreshFruitPortal.com el presidente del Comité Argentino de Arándanos, Federico Baya.

“Ese 50% que se envía por transporte aéreo es lo que probablemente se verá afectado por las medidas”.

Baya y Alejandro Pannunzio del organismo de la industria de Mesopotamia están en conversaciones con la aerolínea nacional Aerolineas Argentinas para tratar de asegurar vuelos para las exportaciones iniciales de la temporada y garantizar el flujo de la fruta a los mercados extranjeros.

“Estamos seguros de que vamos a tener su colaboración para poder suministrar destinos que exigen nuestra fruta”.

Argentina exporta típicamente alrededor de 16,000 toneladas métricas (TM) de arándanos, y casi todos van a los Estados Unidos, el Reino Unido y Europa. Las cosechas para el mercado local comienzan en junio.

Aunque la industria de arándanos de Argentina está preocupada por los aspectos logísticos de la próxima temporada, algo de lo que está satisfecho es el aumento de la demanda de frutas en todo el mundo, y especialmente los arándanos.

“Los arándanos se están revitalizando, especialmente en los Estados Unidos, un país con más de 300 millones de personas y un consumo promedio anual de 800 gramos por persona”, dijo Baya.

Pannunzio agregó que el consumo también está aumentando en Europa.

“Así que el mercado definitivamente está ahí. La pregunta es cuánto estarán dispuestos a pagar los consumidores es la gran pregunta”, dijo.

Los representantes agregaron que las empresas argentinas de arándanos han implementado nuevos protocolos para proteger a los trabajadores en medio de la pandemia de Covid-19.