El ministro de Agricultura de Chile, Antonio Walker, sostuvo que “el tema hídrico tiene un rol fundamental (…) Chile tiene agua, vierte al mar más de 10 mil millones de metros cúbicos todos los años y si solo aprovecháramos el 20% podríamos regar un millón de hectáreas más y dar seguridad de riego. ¿Cuál es el problema de Chile?, que tenemos agua, pero una infraestructura de riego muy precaria”.

Las declaraciones del ministro de Agricultura se dieron en el contexto de los paneles de conversación realizados en la última FruitCare2020, organizada por la Federación de Exportadores de Fruta de Chile (Fedefruta), en donde hubo consenso que el país continúa con un déficit hídrico “y técnicamente en sequía o crisis hídrica” pese a las lluvias de junio y julio.

Fedefruta 

Jorge Valenzuela, presidente de Fedefruta, añadió que, hasta ahora, el Estado se encuentra al debe en la inversión para infraestructura hídrica.

“En la práctica, nos ha provocado una trampa el tener una visión del agua bajo la premisa de hacer grandes embalses, y eso ha sido un error en la discusión de las políticas públicas. Hoy necesitamos matrices hídricas por cuenca, porque cada una es distinta por su configuración, pendiente, cantidad de agua en la cordillera, etc., incorporar plantas desalinizadoras en las regiones cuyas configuraciones lo permitan, y conectarlas con embalses intermedios», aseguró.

El debate que viene

En el aspecto jurídico, Rodrigo Vergara, ex presidente del Banco Central, señaló que “es importante dejar en claro que va a haber un debate en la Constitución respecto al tema de las aguas, qué duda cabe, pero debemos tener claro también qué cosas van en la Constitución, y cuáles van en las políticas públicas y la Ley. En la Constitución vamos a tener toda la discusión sobre el concepto de bien nacional de uso público y el tema de priorización de las aguas. El resto, son cosas de políticas públicas, donde tenemos que trabajar mucho más hoy en día».

En esta misma perspectiva, el ministro Antonio Walker agregó finalmente que «antes uno podía tener agua y no ocuparla, pero usted en el futuro, no va a poder tener agua sin aprovecharla para un objetivo, entonces vienen grandes cambios, un tremendo debate que debe ser técnico».

Megasequía 

Chile ha enfrentado tal vez la más profunda sequía sufrida en la zona central del país, acumulando más de una década de escasez hídrica de manera consecutiva, por lo que los especialistas no dudan en calificar estos años como los peores de la historia del país.

Si bien es cierto que estos fenómenos no suceden en determinadas fechas, ni se puede determinar de manera anticipada su intensidad o prolongación en el tiempo, por lo general corresponden a ciclos que tienen una maduración que ya se ha aprendido a conocer, por lo que la norma histórica es que se alternen periodos secos y húmedos cada 20 años aproximadamente.

¿Ciclos o realidad permanente?

El académico y director del Centro de Agricultura y Medio Ambiente (Agrimed) de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile, Fernando Santibáñez, es el experto más consultado en estos temas y explica que estos ciclos están asociados a la Oscilación Decadal del Pacífico o PDO (Pacific Decadal Oscillation), que es una variación del clima que alterna fases de calentamiento y de enfriamiento del océano cada 20 o 30 años.

Sin embargo, advierte que existe la posibilidad que este estado de cosas se mantenga con una mayor permanencia en el tiempo, por un fenómeno llamado Cambio Abrupto del Clima, que consiste en que en una década la realidad climática puede cambiar radicalmente y dejar de ser un ciclo para instalarse como una realidad permanente. Este fenómeno climático ya se ha presentado en diferentes países y regiones, cambiando abruptamente las condiciones climatológicas de manera irreversible.