La postura de la American Blueberry Growers Alliance (ABGA) sobre las importaciones no ha cambiado con los años: se ha infligido un daño grave a los agricultores estadounidenses, especialmente a los de Florida y Georgia.

Pero, ¿cuál es la posición del presidente Biden sobre este tema? Esa es la postura que finalmente decidirá la investigación de la Sección 201 con respecto a las importaciones de arándanos. Incluso si la Comisión de Comercio Internacional (ITC) decide a favor de la ABGA con su voto el jueves, la decisión final recae en Biden y su administración.

“Cuando la gente me preguntó sobre esto desde el principio, sentí que íbamos a ganar en el ITC, pero ¿el presidente lo firma o no? Quizás sea un lanzamiento de moneda 50-50, no lo sé. Las personas más inteligentes que yo pueden darse cuenta de eso ”, dijo Ryan Atwood, que vive en Mount Dora, Florida y cultiva 56 acres de arándanos, administra otros 350 acres y es copropietario de la planta de empaque más grande del sureste de Estados Unidos.

Audiencia virtual con ITC

La decisión de la ITC del jueves se produce un mes después de que miembros de ABGA y líderes de la industria y del Congreso testificaran en una audiencia virtual ante la ITC sobre el impacto negativo que han tenido las importaciones de arándanos de México, Perú, Chile, Argentina y Canadá en el mercado nacional.

Si se encuentra una lesión grave, la ITC formulará una recomendación. Pero el presidente tomará la decisión final.

“La decisión final vendrá del escritorio del presidente. Independientemente del lado del pasillo en el que se siente, a todos nos gusta comer. A todos nos gusta comer arándanos ”, dijo Jerome Crosby, productor de arándanos de Georgia y presidente de la American Blueberry Growers Alliance. “La comida es probablemente el tema más partidista en Estados Unidos cuando se trata de eso. No importa de qué etapa de la vida vengas, te gusta comer algo. Eso hace que el agricultor sea un amigo de todo ser humano. Creo que cualquiera que se ajuste a esa categoría de consumo de alimentos tendrá interés en que el agricultor estadounidense se quede en su lugar “.