La importancia de la logística de cosecha y embalaje en la comercialización del arándano
La calidad y condición de la fruta son dos elementos que se han convertido en indispensables para mantenerse competitivos en el mercado mundial del arándano. Las exigencias de los consumidores aumentan y ya no basta sólo cumplir con el BBC (bloom, brix, calibre), sino que se agregan exigencias respecto al buen sabor e incluso al color del fruto, además de elementos estéticos de buena apariencia.
Demás está decir que en los estándares internacionales ya no hay espacio para frutos deformes o inmaduros, o de sabores extraños, ni menos con signos de hongos o pudriciones. El rechazo en los envíos provoca grandes pérdidas a los productores y de paso un desprestigio para la marca y la industria exportadora.
Un aspecto gravitante
La logística en el proceso de cosecha y embalaje es uno de los aspectos gravitantes en los resultados de calidad y condición de la fruta en su etapa de comercialización. Una buena metodología y planificación, la profesionalización del proceso, el buen uso de los recursos tecnológicos y logísticos, y la eficiencia en el proceso de embalaje, son requisitos técnicos que pueden garantizar el éxito o hacer fracasar la totalidad de la producción en los mercados.
Este aspecto del proceso productivo del arándano se tratará por el investigador Bruno Defilippi, en una charla técnica para abordar “Calidad y condición de la fruta: Importancia de la logística de cosecha y embalaje en la comercialización del arándano”, el jueves 27 de agosto desde las 10.30 a.m. (hora chilena) en el contexto del Mes Internacional del Arándano.
Actualizar o adquirir conocimientos en este tema es extremadamente necesario para los productores. El arándano es un fruto muy delicado para enfrentar el estrés de la cosecha y poscosecha, tiene una epidermis delgada que sufre daños mecánicos en su manipulación y deshidratación por su herida pedicelar al desprenderlo de la planta, y es muy susceptible a pudriciones y ablandamiento.
Variedades y variantes
Son muchas las variantes que hay que conjugar para garantizar una buena cosecha, y éstas se multiplican cuando hay que garantizar que la fruta tenga una buena llegada a los distantes mercados de destino y al consumidor final.
El cultivo del arándano tiene un alto número de especies y variedades de plantas, y cada una de ellas cuenta con características específicas. Existe un efecto varietal sobre la calidad y condición de fruta en destino y esto implica un gran desafío en cuanto a la toma de decisiones correctas respecto a los índices de cosecha por variedad, como cuándo cosechar o hasta cuándo hacerlo.
Todo comienza en el huerto
La calidad y condición de la fruta se encuentra además influenciada por factores de manejo agronómico, particularmente aquellos relacionados con la regulación de carga frutal y nutrición de los huertos y al mismo tiempo, por las condiciones climáticas que influyen en el cultivo en cada temporada. El arándano se extiende cada día a más y distintas zonas agroclimáticas y con diferentes condiciones de precosecha respecto a riego, nutrición o cuidados.
Para entregar un producto consistente y de calidad homogénea se debe conocer las características específicas de las variedades cultivadas, sus fortalezas y limitaciones, y manejar los conceptos básicos de poscosecha de fruta, desarrollando tecnologías adecuadas a las condiciones propias, además de estar bien informado de los requerimientos del mercado, en cuanto a sus limitaciones y riesgos.
Para participar en la charla “Calidad y condición de la fruta: Importancia de la logística de cosecha y embalaje en la comercialización del arándano” el jueves 27 desde las 10.30 a.m. (hora chilena), te puedes conectar desde cualquier lugar del mundo en el siguiente enlace:
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