Berries, el agroalimento más rentable del campo mexicano
México está viviendo una auténtica revolución agrícola silenciosa. Entre surcos de tierra y manos campesinas, las berries —fresas, arándanos, frambuesas y moras— se han convertido en el agroalimento más rentable del país, desplazando a cultivos tradicionales y atrayendo la atención de inversionistas, exportadores y consumidores internacionales.
Aunque su volumen de producción no es el más alto, su impacto económico sí lo es. En lo que va de 2025, las berries han generado 2,444 millones de dólares en exportaciones, posicionándose como el segundo producto más lucrativo del campo mexicano, sólo por debajo del aguacate.
Una historia de éxito y rentabilidad sin precedentes
De acuerdo con el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) y el Banco de México, México exportó 441 mil toneladas de berries en los primeros nueve meses de 2025. Esta cifra, aunque modesta comparada con los 919 mil toneladas del aguacate o el millón 381 mil del jitomate, demuestra su impresionante eficiencia económica: menos volumen, más ganancia.
El jitomate lidera en cantidad, pero no en rentabilidad. Mientras que un millón 381 mil toneladas generaron 1,952 millones de dólares, las berries alcanzaron casi la misma cifra con apenas un tercio del volumen.
Un ejemplo claro de que la calidad, no la cantidad, es lo que define el nuevo rumbo del campo mexicano.
Chapingo revela el secreto: su alta relación beneficio-costo
Un estudio de la Universidad Autónoma Chapingo confirma por qué las berries son la joya del agro nacional. Su índice beneficio-costo supera con creces al de los cultivos básicos:
- Arándano: 2.82
- Frambuesa: 1.88
- Fresa: 1.82
- Zarzamora: 1.76
En comparación, la caña de azúcar alcanza apenas 1.5, y el maíz 1.2.
Esto significa que por cada peso invertido, los productores de berries ganan casi el triple, una cifra comparable solo con el aguacate (1.84), el otro gigante verde de las exportaciones mexicanas.
El boom de los “superalimentos” mexicanos en el extranjero
El auge de las berries no es casualidad. Su éxito se debe a la creciente demanda en Estados Unidos y a consumidores de alto poder adquisitivo que las consideran “superalimentos” por su valor nutricional y antioxidante.
Las frutillas mexicanas han logrado conquistar los estantes premium de supermercados norteamericanos, donde se asocian con salud, frescura y sostenibilidad. Además, México se ha convertido en uno de los mayores exportadores de berries del mundo, especialmente en los estados de Michoacán, Jalisco y Baja California.
Este fenómeno no sólo genera divisas, sino también empleo y desarrollo en regiones rurales que antes dependían de cultivos de bajo rendimiento.
El futuro del agro mexicano: innovación y sostenibilidad
La historia de las berries demuestra que el futuro del campo mexicano está en la diversificación, la tecnología agrícola y la exportación inteligente. A medida que la demanda internacional crece, la clave será equilibrar rentabilidad con prácticas sostenibles que protejan los suelos y garanticen condiciones justas para los trabajadores del campo.
En palabras de los especialistas, las berries son más que un producto de exportación: son el símbolo del nuevo rostro del agro mexicano, competitivo, rentable y global.