Europa:¿Qué pasará con las frutas y verduras después de Covid?
Según algunos de los empresarios convocados en gran secreto para este encuentro, el nuevo ministro presentó una agenda ambiciosa y concreta: una dotación de más de 1.000 millones de euros anuales durante 3 años a favor de las empresas italianas. Una lluvia de dinero inesperada para la que promete ser la mayor revolución vivida por el sector.
Revolución frutícola
Una revolución que, finalmente, tendrá una guía institucional : en Roma se han dado cuenta de que existen las frutas y hortalizas y el nuevo Ministro de Políticas Agrarias, aunque no lo ha anunciado con gran fanfarria, tiene las ideas claras. En el primer encuentro informal organizado en Zoom dejó a todos boquiabiertos con una serie de propuestas, cada una acompañada de los recursos que el Mipaaf puede asignar, recursos que todavía no somos capaces de aportar de forma individual pero que en conjunto deberían superar los 1.250 millones de euros anuales durante los próximos tres años.
Fondo de Recuperación
También se registra un paso adelante desde el mundo de la producción : fuentes confidenciales aseguran que hay una negociación en una etapa “muy avanzada” para una agregación sin precedentes de la cadena de suministro de frutas y hortalizas Made in Italy . El proyecto, que involucrará a las principales producciones nacionales, tendrá como líder las regiones de Piamonte, Emilia Romagna, Sicilia y Campania, cuyas principales empresas crearán un consorcio para incentivar las exportaciones. El nombre provisional de la instalación es Piamonte-Emilia Romagna-Sicilia-Campania-Export (FISH).
Distribución a gran escala
Se necesitó el coronavirus para que los productores volvieran a la razón, para derribar vallas y convencer a las empresas de que salieran de la sombra del campanario. Pero ahora no es el momento de reflexionar sobre los errores del pasado, tenemos que mirar hacia el futuro: incluso allí. La distribución a gran escala -o mejor dicho las principales marcas del país- quieren hacer un pacto hortofrutícola. ¿De qué se trata? Es un programa ambicioso para evitar promociones sin sentido, para gestionar mejor la oferta hortofrutícola y sobre todo para reconocer la justa retribución a los productores: con un panorama productivo más agregado, de hecho, será más fácil de planificar. Y la propia distribución se comprometerá, poniendo también recursos en una innovadora campaña de comunicación dirigida al consumidor, con el objetivo de que las frutas y hortalizas vayan más allá de los ya conocidos aspectos sanitarios.
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